lunes, 10 de octubre de 2022

La Casa del Dragón, temporada 1, episodio 8

probando uno dos

probando

Perdón, es que cuando empiezo a escribir no me deja el espacio entre párrafos y después sí, y tengo que andar copiando y pegando desde el bloc de notas de A NADIE LE IMPORTA IGNACIO. Esta gente está acá porque miran una serie los domingos, o no la miran, y les gusta, o no les gusta, y por alguna extraña razón quieren leer un resumen desordenado, inútil y obsesionado con cambiar todos los nombres. Eso en particular hizo que tuviera que pausar el episodio como quince veces, porque no entendía nada de lo que estaba pasando. Ahora sé lo que se siente leer estas reseñas.

Pasaron un montón de años desde el episodio anterior. Como seis. Que es más o menos el tiempo subjetivo que transcurre entre que empieza un episodio de Los Anillos de Poder y que termina. Pero no estamos acá para burlarnos de otra serie sino de la nuestra, porque cuando hay confianza se puede hacer humor, siempre y cuando los micrófonos estén cerrados. Ahora lo puedo decir, durante años en TV Ciudad pasaba por el amargo que se quedaba callado y hacía sudokus antes de empezar Reporte Descomunal, pero es porque una vez que tenés un solapero puesto, tenés que ser y parecer. No fue suficiente; estaba sentado al lado de la persona que ha destruido más puentes que los ucranianos (hola, Leo, gracias por leerme como siempre, te quiero mucho).

Ya me distraje ocho veces desde que arranqué a escribir.

El episodio dio otro salto temporal, lo cual tuvo la consecuencia clásica de que todos los actores botijas fueron reemplazados, ya sea por actores un poco menos botijas o por actores juveniles. ¿Y los viejos? En el caso de las dos mujeres principales, siguen siendo las mismas desde hace un par de episodios, mientras que los dos hombres principales (y alguno más que ya veremos) arrastran más o menos 300 años desde el inicio de la temporada. En el caso del rey Viseris podemos decir que se le nota, pero Diabólicon, si realmente hubiera envejecido de acuerdo al tiempo que pasó, se vería más o meno así:

Qué lindo cuando la foto ya está hecha. En este caso, es Matt Smith en el especial de Doctor Who The Time of the Doctor. Fue el mejor de los doctores, y a Tennant lo come acá y lo caga en la esquina.

Sigamos, que todavía ni empezaron a pasar cosas. Lo más importante, lo que desencadenó toda la acción de la noche del domingo, fue que se la dieron a (empieza a buscar nombres en los artículos anteriores) Espossis Rastarion en un enfrentamiento con ese enemigo que supuestamente está jodiendo desde hace décadas, pero nunca queda claro de dónde vienen ni de dónde salen. Los herederos de la tradición. Escuchen otra voz. ¿De quién será? Y podría seguir con el resto de la letra de Los futuros murguistas pero estoy harto de acostarme tan tarde los luningos. La cosa es así: Espossis está con un pie afuera, así que después de seis años se vuelve a hablar de la sucesión de Madera de Balsa (no me digan que no es bueno traducir Driftwood como Madera de Balsa, los tipos son marineros, funciona, no me van a decir que no).

Sobre la sucesión del trono de Madera de Balsa (guiño), se había establecido que si los Rastarion apoyaban a Heredarien primero y a su hijo Primerys después, Segundys (el siguiente hijo de Heredarien con... Heredarion, guiño, guiño) sería el titular de la casa Heredarion. La puta madre, qué lío de nombres, acá estaba poniendo pausa como loco, iban dos minutos de programa y yo ya estaba mareadísimo. No importa, seguro ustedes se acuerdan de ese arreglo, y Carocossis no tiene intenciones de modificarlo, pero el que se puso de punta fue Cuñadis (o Cuñadys, el tipo de i es indistinta). Él, como el 98% del reino, sabe que esos nenes no son sus sobrinos nietos, y además se cree muy capacitado para la tarea de cobrar por dirigir a ese pedacito de tierra y agua.

No puedo creer que recién voy tipo dos minutos del episodio. Así no, Ignacio, que me duermo. That's what she said.

Escena cortita de Diabólicon juntando tres huevos de dragón, que parece que los ponen mientras cagan. Siguiente escena.

Primerys, el heredero de Heredarien, practica el lenguaje antiguo para no quedar como la mitad de los actores, que parece que estuvieran leyendo un prospecto de Cialis (me contaron). Por ahí anda la madre y luego llega la nueva pareja de mamá (bueno, desde hace al menos SEIS AÑOS) que también es el tío de mamá. En fin. Heredarien está encinta (no se había inventado la grabación digital) y luego descubriremos que en desde el domingo pasado ya alumbró a otros dos princestitos (see what I did there?). Luego se enteran de que volvió a generarse una disputa por herencias, como en los siete episodios anteriores y como en cada generación de mi familia, es gracioso porque es verdad. Y deciden viajar a la capital. Disculpen que no sea tan prolijo, estoy probando escrituras un poco más caóticas en este espacio y en un FANZINE que estoy preparando y que ya les contaré, aunque lo ideal habría sido terminarlo antes de que vaya la primera temporada, pero no quiero agregarme presión porque ya soy una olla Essen. Segunda semana consecutiva con referencias a las ollas Essen, no quiero canje, para qué si hace cuatro meses que la garrafa de la cocina se terminó. ¿En qué estaba?

Llegan a la capital y no los recibe nadie, como casi siempre que llegan personas a algún sitio en esta serie. Debe ser porque tienen menos presupuesto. Mientras tanto, la Mesa Chica del reino está comandada por la reina Aliciente, porque de su marido cada domingo van quedando menos pedacitos, como el chiste aquel del bebé que les traían a los padres una oreja (después de decirles todo lo que le faltaba) y ellos le susurraban "Te vamos a querer igual" y el doctor decía "Háblele más fuerte, que es sordo".

Googleando encontré almohadas con el agujerito para las orejas, igual lo mejor son los colchones con el agujero para el brazo que te queda abajo. Espero que su inventor sea millonario, aunque seguro no tiene tiempo de gastar el dinero porque se pasa todo el día en la cama, ya que con un colchón así nadie querría levantarse.

En la mesa chica sigue estando el papá de Fleabag, que en el primer episodio tenía como noventa años, así que ya es un prodigio de la medicina de Targarilandia. Mientras tanto, Heredarien y Diabólicon van a visitar a su padre/hermano, pasando por la maqueta de la ciudad, llena de telarañas como está mi barco pirata de Playmobil porque un día dejé de jugar con él. A los 35 años, más o menos. El rey está hecho mierda, es un jenga al que le faltan piezas, otras están pegadas con curitas usadas y todas se bambolean con la brisa más débil... pero todavía no se cae. Sabe que el día que falte, la sucesión va a ser más complicada que la de la familia Roy en, justamente, Sucesión (pianito). Todavía no sé con quién hacer el Photoshop, porque el de Cuentos de la Cripta es muy cliché. Voy a ir con la versión de Bane de Batman Beyond (que en español la tradujeron DEL INGLÉS AL INGLÉS como Batman of the Future, un abrazo a Edward James Peras, creo que nunca me enganché con la serie solamente por la traducción de mierda del título). La foto fue arriba de todo, porque no es muy spoileable y sirve para compartir en las redes. Perdón por pensar en ustedes.

Bué, a este paso... Ahí vino una escena compleja de reseñar inútilmente, ya que la reina Aliciente recibió a una de las señoras que ayudan a limpiar en el castillo, quien denunció haber sido ultrajada por Cuscarien. Ella le tiró dos frases matadoras: "No fue tu culpa. Te creo". Peeeeeero después empezó a comerle la cabeza con eso de que nadie le iba a creer si boquillaba por ahí y le trajo un tecito de hierboprostol porque el reino ya tiene suficientes bwords (no seré yo quien diga esa palabra por primera vez en la reseña). Luego la señora fue a visitar a su hijo, que anda más en bolas que un viejo recién operado, y le pidió que se pusiera las pilas. El pibe se puso a llorar, queriendo demostrar que no es el malo de la familia (o al menos el peor... ya llegaremos a él) y le recordaron que ahora está casado. Si entendí bien, se casó con la hermana, pero ya es tarde y la comprensión audiovisual no es lo mío (salvo que mis empleadores estén leyendo esto).

La pareja rubia se juntó con la reina y la acusó de tenerlo lelo al rey en base a... y permítanme que reflote un inutilmeme de Juego de Tronos... té de leche de Popi.

En fin. Además se quejaron de que sacó todos los pósters de los Targaryen de las paredes y los reemplazó con figuras religiosas. Pero vayamos directo al patio, donde Primerys y Segundys andan por ahí, siendo observados por todos ya que básicamente son la versión en negativo de un Rastarion. ¿Y a quiénes se encuentran jugando a las luchas? Al mismísimo Sir Tristón (que cobra por bolo) y a Secundarien, que usa un hermoso parche porque los sobrinitos le sacaron un ojo en el episodio anterior. Todo lo pancho que creció Cuscarien de un domingo al otro, este lo creció en MALDAD. Si quedó igualito que un villano de animé.

Dudé entre ponerle la cara de un personaje de animé con parche a Secundarien o ponerle la cara de secundarien a un villano de animé. Era tarde. Yo qué sé.

Llega Cuñadiss a la capital, a reclamar lo que (según él) es suyo. Y empieza a elucubrar con la reina y con Ottoby, otro que ya debería estar muerto después de todo el tiempo transcurrido y la mala sangre que experimentó. Además de que nunca un "abuelito, abuelito" de parte de Cuscarien ni de nadie. Cero bola al pobre viejo, seguro lo meten a un asilys a la primera de cambius. Ya empecys de nuevis con estarien boludecis de las terminacionis.

La siguiente conversación (hubo varias, pero no estuvieron a la altura del domingo pasado) fue entre Heredarien y su suegra Carocossis. La princesa le juró por los siete dioses que no tuvo nada que ver con la muerte de su marido, así que en cualquier momento los templos se vienen abajo. Y le ofreció casar a Primerys y Segundys con Canitas I y Canitas II, respectivamentis (basta).

Acá vino lo que terminaría en un bochornoso final de episodio, digno de una película de las gemelas Olsen. Viseris (tiene una visera en el primer Photoshop, por eso lo escribo con "i") empieza otra vez a joder con la canción de hielo y fuego *inserten ustedes a Leo DiCaprio apuntando a la tele*. No puede hablar, no puede respirar, pero ahí está, vivito y agonizando. Le ofrecen leche del payasito y dice que no, porque lo deja lelo. Y nos vamos finalmente al momento del juicio por los derechos de televisación de Madera de Balsa.

Con Ottoby (la Mano) en el trono de hierro, arrancan los testimonios. Primero Cuñadiss dice que su sangre es incuestionable, tirándole un palito a los pibes. Y cuando Heredarien quiere defenderse, se abre la puerta del salón y entra el mismísimo Viseris. Los siguientes trece minutos del episodio consistieron en el rey caminando hasta el trono, más o menos como la escena del pelotón de fusilamiento de Top Secret. Esperen que voy a hacerle una captura a la escena, por suerte compré la película en Google Play hace años porque nunca la encuentro en plataformas. Esto está tardando más de la cuenta porque no me hace un previewcito de lo que se viene después, tengan paciencia. Eso que escuchan es una hora de sueño huyendo de aquí a toda velocidad.

Ahí está. Podría tuitearla y conseguir miles de likes, pero dejaría de ser un anónimo que puede ir al supermercado o al cine XXX sin que lo reconozcan. Todavía no sé qué hacer. A propósito, acabo de darme cuenta de que lo que me llevaba más tiempo eran las fotos. Y aquí estoy de nuevo, subiendo pavadas en lugar de escribir y dormir. Porque antes hacía todas las fotos al final, pero ahora las voy haciendo entre párrafo y párrafo, y veo el tiempo que pasa y me quiero morDORMIR.

Llegó Viseris y el mejor momento del episodio fue cuando se le cayó la corona y el que se la alcanzó y lo ayudó a subir al trono fue SU HERMANO DIABÓLICON, cuánto ha cambiado desde que era aquel pillo conspirativo, ahora es solo un incestuoso conspirativo. Y lo segundo mejor del episodio fue cuando se sentó y tiró onda "Che, este tema ya estaba cerrado, ¿qué mierda hacen acá?". De todos modos, dejó hablar a Carocossis, que reafirmó lo de Segundys y lo del casorio con las nietitas. Pero Cuñadiss se les plantó de punta a todos y dijo que no iba a permitir que el heredero fuera ese bword. Pero no dijo "bword", dijo la palabra prohibida... Dijo (sus palabras, no las mías) "Son unos bastardos, y la madre es una trola". Y sin decir ni mu, Diabólicon lo semidecapitó. Porque le cortó la cabeza, pero por la mitad, como si estuviera jugando al Fruit Ninja. Va imagen rapidita.

En la escena siguiente prepararon el cadáveris frente a Carocossis, que tiene un promedio de cuatro duelos por episodio, y todos se prepararon para la gran cena de camaradería. Menos ella, que tenía que ir a hacer espacio en el castillo, porque ya no tiene lugar entre tantos cadáveres.

A la cena llegó el rey en una silla cargada por sus empleados, porque en el reino existen las sillas y las ruedas, pero no los inventores. Alrededor de la mesa, toditos peleados, sacándose los ojos en forma figurativa (la literal fue hace unos años). Y Viseris, que andaba con una careta porque hasta en la cara le faltaban piezas de jenga, tiró un discursete para que se amiguen. Con la misma suerte que corría uno de los personajes de Jack Nicholson (hacía dos) en la hermosa Mars Attacks!

"Háganlo por mí". Y ahí la princesa Heredarien se paró y brindó por la reina Aliciente, con el típico "Gracias por tanto y perdón por tan poco". Después se paró la reina y brindó por la princesa. Hasta acá todo bien, salvo Cuscarien que se pasaba de bobo con Primerys. De todas maneras, Primerys se paró y brindó por sus... parientes, no me hagan calcular qué son a esta hora. Y Martita, si es que es ella y de verdad se casó con su hermano, brindó por Canitas I y II. Todo venía bien, el rey se estaba yendo, pero alguno de los nenes de Heredarien (también podría haber sido Cuscarien) le mandó poner frente a Secundarien un chanchito al spiedo. Como aquel dragón-chancho que le habían "regalado" hace varios años y domingos. ¡Para qué!

Ahí se paró y no sé si se habrá entendido con los subtítulos en español (yo los pongo en inglés por esnob), pero los primeros tres hijos de Heredarien fueron con Ser Manito, que se apellidaba Fuerte. Entonces el tuerto Secundarien brindó por los tres hermanos. "Atractivos, sabios, y al igual que su padre... FUERTES". ¿Cómo dijo? "FUERTES". Ahí Heredarien tiró el gran comentario de madre cuando está en un lugar en el que no quieren a sus hijos: "Mejor nos vamos" y le prometió a la reina que después de dejar a la familia en casa se volvía en Druber (que suena mejor que Ubergón).

Antes del final hubo una escenita en el cachondero, con la madama que andaba con Diabólicon, pero para el final quedó el momento Cris Morena, cuando un rey a dos de salir orejeó dos del mismo palo y como pudo terminó de contar la anécdota de la canción de hielo y fuego y el príncipe que los va a unir a todos, pero era Aliciente la que escuchaba y obviamente entendió todo mal y ahora el rey está muerto y andá a componer ese teléfono a lo de una vidente.

¡Listo! Son casi las tres de la mañana y antes de irme van los avisos parroquiales. El más sencillo: el link de descarga de la Guía Inútil de Juego de Tronos, que algún día ampliaré con estos episodios, pero como hay segunda temporada confirmada no sé si esperar. Mientras, tienen todas las reseñas de la serie madre, más extras.

Lo otro: quiero agradecerles (o, como dirían los periodistas, sin el quiero: "agradecerles...") a aquellos que colaboraron con la causa, ya que llegó a Uruguay el libro que compré con los Donatellos. Es decir, con los que apretaron en Donate. Es una novela de Grant Morrison que voy leyendo tranqui porque él escribe complicau. Y aquí va foto a las 2:53 AM como prueba de "vida" (nótense las comillas).

Hasta la semana que viene, los dejo con ya saben quién, porque nunca se tienen suficientes libros.

1 comentario:

ValeriaC dijo...

Ma rá vi llo so.
No sé si usted supo que en algún momento el Cuscarien fue interpretado por el hijo de David Tennant (10 Doctor) y nieto de Peter Davidson (5to Doctor, Tristan Farnon de la serie original), así que agradezcamos que Cuscarien sólo tiene a Sunfyre y no una TARDIS.