Movidito movidito (juntitos los dos juntitos)

A los afortunados y desafortunadas que conocen mi dormitorio en vivo y en directo (y no por la solapa de un libro pendorcho) saben que más que una base de operaciones, es un organismo en simbiosis conmigo.

La relación que tengo con mi cuarto (la más larga de mi vida) necesita algún tipo de renovación cada dos o tres años. Y mi pereza y falta de liquidez limita la renovación a la rotación de los muebles que allí se encuentran.

Ayer comencé a jugar al tetris con el mobiliario. Actividad que me produjo un dolor de espalda mefistofélico hoy al levantarme. No puedo tocarme las rodillas con las manos sin flexionar las piernas. Pero bueno, en breve disfrutaré del reordenamiento.

Lo primero fue trasladar la estantería que guarda mi colección de comics. Antes estaba ubicada al costado de la puerta, pero ahora está delante del corcho. Para moverla tuve que vaciarla. Así que el piso de mi cuarto quedó tatuado de tapas de Batman, Superman, JLA, JSA y una plétora de títulos de Vertigo.

Aproveché para reordenar un poco las colecciones, casi que por última vez, viendo cómo ha disminuido la compra de tales unidades portátiles de entretenimiento. Mi viejo me dio una mano para mover la estantería vacía y luego volví a cargarla.

Al lado de la puerta quedó la cama, que antes estaba abajo de la ventana. También precisé de la ayuda de mi progenitor para la movida. Su columna vertebral, que parece el ocho del Parque Rodó, funcionaba mejor que mi prístina columnita, desacostumbrada a cualquier esfuerzo físico.

Mover la cama creó un vacío debajo de la ventana. Vacío que será cubierto por aquel escritorio con el que inauguré mi cuarto allá por el 1996, más o menos. En donde apoyé los libros de Historia del Arte mientras estudiaba para el examen de diciembre de 1997. Y poca cosa más. Tan poquito lo usaba, que por eso lo retiré poco tiempo después.

El sofá queda prácticamente en el mismo lugar. Lo que cambia es la posición de la mesita de luz. Antes estaba a la derecha del sofá (mirado desde el sofá) pero ahora quedó a la izquierda.

El televisor va a quedar más o menos donde está. Capaz que medio metro adelante, para que no me quede muy lejos de la cama. Y la computadora, que hasta ahora estaba en el piso, va a quedar instalada en el escritorio.

Lo que todavía no está claro es si va a ser esa computadora o la poderosa, estoy cocinando ese asunto con mi viejo. El enroque de computadoras incluiría la conexión de ADSL en mi cuarto, terminando de eliminar cualquier necesidad de salir de ahí. La próxima vez que se crucen conmigo sáquenme una foto, quizás sea la última vez que me vean en persona (no tengo cámara web).

Hoy de noche continúa el tour de force. Primero tengo que pasar la aspiradora en aquellas esquinas que antes estaban ocultas por camas y estanterías, y que ahora muestran con honor los miles de kilómetros de telas de araña, otra que Peter Parker con diarrea (las arañas largan la tela por el orto).

Después tengo que mover un par de cositas para poder ubicar el escritorio. Y ahí sí, cuando todos los muebles grandes queden en su lugar, comenzará la lenta y desagradable tarea de reacomodar las toneladas de residuos que cubren el piso de mi cuarto.

Revistas viejas, papeles varios, libros apilados y miles de elementos inclasificables. Lo ideal sería deshacerse del 90% de ellos, pero para eso hay que revisarlos uno por uno (no sea cosa de tirar algo interesante). Esto llevaría más o menos cuatro meses, y como soy un vago al cubo, con seguridad recurra a la misma solución de siempre: apilar las porquerías y guardarlas adentro del placard (que no cambia de lugar, porque está empotrado).

No me quería ir sin decirles que a mí no me agarran de gil. No, no me refiero a ustedes, que no pegan un ojo con tal de agarrarme de gil. Me refiero a los malnacidos de Fox. Porque ni por un momento me creo que la "primer" temporada de Prison Break terminó en donde terminó. Los hijos de puta la cortaron al medio, ahora repiten la primer mitad y me tienen con los tres huevos en la garganta por tres o cuatro meses.

Me parece que el eMule tendrá que hacer lo que estos caracagadas se rehúsan a hacer... proveerme de los capítulos que le faltan a esta serie, que semana a semana pelea los primeros puestos de la programación. Los puestos del dos hacia abajo, porque el uno lo tiene Policías en Acción y no se lo saca nadie.

Saludos a la gilada que se quedó en enero. Igual Montevideo no es el desierto que era el enero pasado. A lo sumo una sabana.

Nacho Alcuri
"siente la vibra, nena"