Es que mover el diafragma en aquel sótano repleto de jóvenes con raros peinados (¿nuevos?) fue una hazaña. Mea culpa. Desde este blog recomendé el toque del sábado, sin medir las consecuencias. Centenares de lectores de este humilde medio de comunicación coparon las instalaciones del Living a tal punto que apenas podía moverme en el lugar al ritmo de los tíos de Astroboy.
Vamos a empezar por las pálidas: hace meses que les pedí a estos mugrientos las letras de los temas y me mandaron sólo una. Eso sí, había gatinas que se sabían de memoria canciones que habían escuchado un par de veces en su vida. Todo bien, privilegien a las minitas por sobre los fieles seguidores. (No, en serio, todo bien. Yo haría lo mismo)
El toque estuvo bueno, me encontré con habitués de tales ceremonias musicales. Me ofrecieron alcohol 325 veces. Todavía les cuesta acordarse, pero ya van a aprender.
Además fui el autor del mejor bocadillo de la noche. En un silencio entre tema y tema, grité desde la última fila con toda la sinceridad del mundo: "¡Rexona me abandonó!", para beneplácito de los presentes, que rieron en mayor o menor medida. No hay forma de firmar los gritos, así que mi popularidad no ha aumentado con ese comentario, pero confirmó que aún no he perdido mi toque.
El frío no impidió que nos quedáramos en la vuelta hasta altas horas, para luego caer en mi hogar dispuesto a un sueñito reparador. La remera estoy por prenderla fuego, ya que el tufo a sudor no se disipa por nada del mundo.
Para el próximo toque, si también tiene lugar en un espacio reducido comparado con las masas que leen este blog y que aceptan mis sugerencias, voy a ser un poco más responsable, y voy a dar la hora y el lugar apenas minutos antes del comienzo, porque aglomeraciones como la del sábado pueden causar problemas estructurales, quilombos con la Dirección de Bomberos y nuevas cremaciones de mis remeras.
Por favor quienes estuvieron aporten sus comentarios, y quienes faltaron inventen como los mejores. Entre todos vamos a tener una idea más o menos potable de cómo estuvo la cosa.
Ignacio Renée Alcuri
4 comentarios:
Hola Nachito, siguiendo tus instrucciones de como publicar un comentario estoy haciendo la prueba.
Bueno con respecto al lo que paso el sabado en el living, no se como lo vivieron ustedes desde el otro lado, pero yo que me encontraba detras de la bateria como siempre que toca astroboy (capaz porque soy el baterista), la verdad tambien senti el abandono del que hablabas a los dos segundos de empezar a tocar (te recomiendo dove si estas decidido a cambiar de marca). Quede ecompletamente mojado, y sin escuchar absolutamente nada de lo que tocaban el resto de mis compañeros de banda.
Pero te paso a contar que prefiero eso mil millones de veces a lo que paso el dia anterior en afe. El proyecto cultural VIENE, no viene ni va para ningun lado. Tocamos para 10 personas contandonos a nosotros, al sonidista ,valerio y el tonga.
Impresionante.
Bueno, muchisimas gracias a todos los que fueron y a los que van siempre, y vayan guardando la platita que el mes que viene tienen un libro y un disco que comprar.
MARLO BRANDO (no marlon, ese fallecio, yo soy marlo)
Excelente reconstrucción del crimen musical estamos llevando adelante, gracias al aporte de todos.
Bienvenido Marlo!!! Denle un aplauso así se anima y empieza a escribir seguido.
GGD: no te ofendas, el objetivo de tales comentarios de mi parte es entretener, y generar en los astrobollos la suficiente vergüenza como para que se pongan las pilas y me manden las letras de una puñetera vez.
Y bien Javier por inventar, o adaptar, o lo que sea. No tenga miedo a dar nombres, a lo sumo terminarás en una zanja al costado de la autopista de la información (nombre vulgar de Internet)
Nacho
valió la pena, sentarse en la vereda,,,,,la la la no eso no,....facil todo es más facil de lo que parece...no estuvo tan sofocante pudo haber sido pior,,,el tema de las glandulas sudoriparas esuvo jodido,,,pasa q no pude ni sacarme el buzo para q mis poros respiraran...me pregunto: yo como perteneciente al género femenino formaré parte de la categoría de "gatinas"...como no sé bien a q se refiere el autor no me produce "rechazo",,,es más,,,más bien me conmueve es verdad,,,escuché los temas un par de veces y ya me sabía la letra,,,¿por qué será?
¿Que querés? ¿Que acepte mi incapacidad auditiva de entender qué canta Martín en inglés, e incluso a veces, en español?
Prefiero hacer juicios de valor sin pies ni cabeza (hecho que me caracteriza) y ver qué consecuencias tienen tales alegatos vacuos.
Tal vez alguna gatina se sienta orgullosa de pertenecer a esa categoría, estaría bueno que compartiera sus sentimientos en este blog.
Todo con una pizca de sal, como dicen los anglosajones.
Nacho
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